Las áreas naturales protegidas y sus categorías de conservación:

Reserva Natural Educativa:

Son áreas que, por sus particularidades o por su ubicación contigua o cercana a las Reservas Naturales Restrictas o Silvestres, brindan oportunidades especiales de educación ambiental o de interpretación de la naturaleza.
Sus objetivos son enseñar los valores inherentes a la protección de la diversidad biológica. Se trata de paisajes y ambientes que han estado libres de perturbación por intervención del hombre, durante un período prolongado de tiempo, o de algún elemento o proceso natural especial.

Parque Nacional:

Son áreas a conservar en su estado natural; son representativas de una región fitozoogeográfica y tienen gran atractivo en bellezas escénicas o de interés científico.

Monumento Natural:

Son áreas, elementos, especies vivas de animales o de plantas, de interés estético, valor histórico o científico, a los cuales se les acuerda protección absoluta.

Reserva Nacional:

Son áreas que interesan para la conservación de sistemas ecológicos, el mantenimiento de zonas protectoras del Parque Nacional contiguo, o la creación de zonas de conservación independientes, cuando la situación existente no requiere o admite el régimen de un Parque Nacional.

Reserva Natural Estricta:

Son áreas donde están prohibidas todas las actividades que modifiquen sus características naturales, que amenacen disminuir su diversidad biológica o que, de cualquier manera, afecten a sus elementos de fauna, flora o tierra, con excepción de aquellas que sean necesarias para el manejo y control de las mismas.

Reserva Natural Silvestre:

Son áreas de extensión considerable que conservan inalterada o muy poco modificada la cualidad silvestre de su ambiente natural y cuya contribución a la conservación de la diversidad biológica es particularmente significativa en virtud de contener representaciones válidas de uno o más ecosistemas, poblaciones animales o vegetales valiosas a dicho fin, a las cuales se les otorga especial protección para preservar la mencionada condición.

 

Jugar sin “juguetes»

El juego es fundamental en el desarrollo de los niños. Los juguetes son instrumentos para tal fin, sin embargo comprarlos no es requisito obligatorio. Es cierto que nos facilitan mucho la tarea educativa porque ya vienen dispuestos con un manual o instructivo que nos ahorran tiempo y desgaste.

Pero hoy queremos hablar de esos otros “juguetes didácticos” que tenemos al alcance de la mano. Esos objetos de la casa o recursos de la naturaleza que si son bien usados pueden constituirse en juguetes educativos sorprendentes, divertidos y económicos para los chicos. Cada uno de ellos permite el desarrollo de una o más dimensiones del niño que son educables: la creatividad, la memoria, el orden, el pensamiento formal, las habilidades motoras y cognitivas.

Estos son algunos de ellos que podemos enseñar a nuestros hijos. Estas categorías no son excluyentes sino una simple manera de organizar la información.
Juegos de construcción y equilibrio.

Para realizar construcciones los más chicos pueden comenzar con las famosas cajas, latas o potes de quesos o dulce de leche apilables. Es muy importante que sean livianos y que no tengan filo.

Para los más grandes, la construcción puede traducirse en el armado de una casita con sillas, un manta o lona; o en la construcción de una pista de autos siguiendo líneas o huecos del propio mobiliario.

Los juegos de construcción desarrollan la motricidad fina y el sentido del equilibrio. Ayudan a medir la fuerza y precisión de los movimientos.
Juegos imaginarios

Jugar al vendedor de helados con potecitos de diferentes tamaños y cucharitas o armar una confitería con tacitas donde tengan que preparar infusiones pueden ser buenas opciones.

Es muy importante que los chicos puedan darle un nuevo sentido a las cosas, salir de lo concreto para imaginar algo diferente, por ejemplo que un palito pueda ser una varita mágica o una silla un cohete espacial.

El juego imaginario es clave para el desarrollo del pensamiento formal, para la conceptualización.
Juegos exploratorios: de observación y descubrimiento.

Recolectar hojas en una plaza, en el jardín o en el campo puede convertirse en una gran actividad si se observan sus formas y colores. Es posible clasificar las mismas y después se puede armar un collage o un herbario.

Si las hojas aburren y se quiere más acción, los bichitos pueden ser grandes motivadores para el aprendizaje. Encontrar caminitos de hormigas con su hormiguero, bichos bolitas debajo de las cortezas, lombrices en un macetero o huevitos de ranas a orilla de los charcos puede transformarse en una gran aventura. Los chicos pueden armar sus propias trampas para poder cazarlos, observarlos, dibujarlos y clasificarlos. Hacerlas es muy fácil y desarrolla en los chicos su capacidad de investigación científica.

Observar, distinguir, clasificar por colecciones y armar una síntesis es desarrollar el pensamiento formal en los chicos.
Juegos creativos

Jugar a armar figuras con las sombras, construir títeres con medias viejas, construir un bowling con botellitas de yougurt vacías, llenar botellas de plástico con diferentes rellenos y luego decorarlas, construir un burbujero a partir de un alambre, son juguetes fáciles de hacer, que demandan de nuestra presencia y que desarrolla en los chicos la capacidad de descubrir diferentes usos de un mismo objeto. Esto favorece a mejorar la plasticidad mental e incrementa la creatividad de los chicos.
Juegos de rendimiento físico

Colgarle un pañuelo del pantalón a un chico para que otros lo alcancen y se lo saquen, trepar árboles, armar un circuito de postas donde tengan que pasar por debajo de una silla, atravesar la cama por arriba y saltar en un pie hasta la puerta favorece el desarrollo físico. Son juegos que estimulan la destreza motora, imprescindibles para chicos inquietos afuera y adentro de la casa.
¡Es sorprendente descubrir con qué poco los chicos pueden divertirse!

Maestros “Bloggeros”

teclado blogueras

Consultamos a los que se animaron a armar el blog y le dedican parte de su tiempo a compartir lo que hacen con sus alumnos ¿por qué lo recomendarían? ¿Encuentran dificultades?

Estas son algunas ventajas que observamos de esta nueva herramienta.
• El blog permite visualizar una totalidad del trabajo, ya que no sólo se puede observar lo que realizó un alumno sino cómo trabajó el grupo en conjunto.

• Las publicaciones dejan entrever la dinámica de la clase, comportamientos, formas de trabajar y los procesos de aprendizaje.

• El blog genera un espacio de diálogo entre los padres y sus hijos, un momento de encuentro donde los chicos se sienten orgullosos de poder mostrar lo que hicieron y sus padres vivenciar y apreciar el proceso educativo.

• El formato o la presentación de los contenidos a través del blog enriquece el trabajo realizado en el cuaderno ya que agrega videos, fotos, revistas, presentaciones o audios.

• Es un medio óptimo para realizar avisos, recordatorios o notificaciones que son importantes reforzar, más allá de que aparezcan en el cuaderno de comunicaciones.

• Se pueden compartir textos de apoyo, sitios y hasta sugerir páginas educativas que se hayan utilizado en el aula y que se pueden rever desde la computadora de cada casa.

• La presentación en formato digital, su comunicación y exposición dinámica estimula al niño en su aprendizaje.

• La implementación del blog educa al alumno en el uso de la tecnología responsable y le brinda enseñanzas sobre diferentes herramientas tecnológicas.

• A través de este medio los padres se sienten incluidos en la comunidad educativa y hasta le brinda un espacio para poder expresar comentarios u opiniones.

• Compartir lo que un maestros hizo con sus alumnos no sólo enriquece a cualquier otro docente que lo ve sino que motiva a que otros se animen también a hacerlo.
Consideraciones

• Es muy importante que previamente a la realización del blog se pida autorización a los padres para poder publicar fotos o imágenes de sus hijos.

• El acceso al blog requiere conexión a internet.

• Es muy importante la presencia de una facilitador digital en la escuela para que motive, sugiera y capacite a los docentes sobre su uso para optimizar sus alcances.

• Al comienzo requiere de tiempo por parte de los docentes y luego de creatividad para que las publicaciones sean atractivas.

• Es fundamental que el maestro bloggero sea criterioso al publicar, ya sea para comunicar sin ofender a nadie, respetando los lineamientos institucionales y promoviendo la participación de todos sus alumnos.

¿Cómo hacer para que los chicos coman más variado?

Niños degustadores en la cocina

Como bien sabemos, los chicos son muy curiosos. Esta característica puede ayudarnos en tanto los hagamos partícipes de la elaboración de la comida. Cuando los niños nos ayudan a cocinar comienzan a descubrir diferentes partes de los alimentos, sus transformaciones a través de la cocción o preparación y sus olores o texturas. Estos hallazgos fomentan el deseo de degustar a medida que se cocina.

Por otra parte, el hecho de que los chicos se sientan autores de la misma comida hace que disfruten de otra forma el plato realizado.

Qué no les extrañe que durante la preparación quieran probar la cáscara de la naranja o sus semillas, ¡es parte de su curiosidad y aprendizaje!
Insistir sin obligar de una manera diferente

Frente a la negativa de los chicos ante determinado alimento es muy importante no rendirse. Nosotros podemos intentar revertir esta situación.

¿Cómo? Seguramente el camino no sea la obligación ya que creamos en ellos una negación aún superior.

La respuesta: insistir con el alimento días más tarde y de una manera diferente, ¡no les facilitemos el NO ME GUSTA!

Por ejemplo podemos dar de probar la zanahoria en bastoncitos para untar con queso, cocida en forma de rueditas, en puré con alguna otra verdura o como salsa en fideítos letra.

¡Tengamos paciencia porque vale la pena ganar estaa batalla!
Experimentar sin jugar con la comida

Seamos creativos, fomentemos la imaginación a través de la experimentación de nuevos sabores. Que los chicos mezclen verduras o frutas y que para coronar la invención le pongan un nombre.

Por ejemplo, podemos mezclar banana con mandarina y bautizar este postre como “bananina” o prepar una gelatina con mitad de agua y el resto yogur de vainilla líquido y nombrarlo “gelayó”.

Experimentar para conocer, probar y comer, no es jugar. Por eso es muy importante que lo que hagamos sea comestible, que los chicos lo puedan disfrutar como obra de su ingenio y que ésto les abra las puertas de la mente para animarse a mezclar verduras o frutar a las cuales les tenían cierto desagravio.
¡Factor sorpresa!

Nunca falla. Ese alimento no deseado, está oculto, difícil de vislumbrar o aparece como contenedor de una sorpresa.

Por ejemplo, hay verduras como el zapallito, calabaza, tomate o huevo que nos sirven de envase o contenedores de algo mágico y gustoso que sabemos que a los chicos les gusta.

En el caso contrario, es posible colocar dentro de alguno de los alimentos anteriores un relleno que bien disfrazado puede ser deseado por el simple hecho de aventurarse en esa presentación.

¡Importante: establecer como regla del “factor sorpresa” que se comen todas sus partes!
¡Vos sos su primer ejemplo!

A veces nos quejamos porque sólo come sanguchitos, panchos, papas fritas y quesito. ¿No será que es lo que nosotros siempre comemos o preparamos?

Es clave no pretender lo que nosotros no promovemos. Somos un ejemplo para ellos y a pesar de que haya cosas que no nos gustan porque conocemos de donde provienen, o el olor no nos motiva, o hayamos tenido una mala experiencia, eso no nos da lugar a que decretemos que a los chicos no les va a gustar.

Preparemos comidas variadas y que sean ellos los que vayan optando por sus preferencias. De paso, tal vez nosotros nos animemos a descubrir que hay alimentos que de grande nos pueden empezar a apetecer.